John Haliburton ha sido un apoyo constante a lo largo de la carrera de Tyrese en el baloncesto, siempre presente en los momentos buenos y malos. Esa noche, lo observó desde las gradas mientras su hijo comenzaba con fuerza, encestando tres triples tempranos y ayudando a Indiana a tomar una ventaja inicial.

Pero el ambiente en el Paycom Center cambió drásticamente apenas unos minutos después de iniciado el primer cuarto. Mientras Tyrese se dirigía hacia la canasta, colapsó repentinamente en el suelo, sujetándose la parte inferior de la pierna derecha con evidente dolor. La arena quedó en silencio, y todas las miradas se dirigieron hacia la estrella de los Pacers—y luego hacia su padre, visiblemente conmocionado en las gradas.

Las cámaras captaron la reacción inmediata de John: se cubría el rostro con las manos, con la postura encorvada por la incredulidad y la preocupación. El impacto emocional era evidente, con John luchando por mantener la compostura mientras Tyrese era asistido para salir de la cancha rumbo al vestuario.

John Haliburton confirma lo peor

Mientras el juego continuaba, los fanáticos y los medios esperaban ansiosamente actualizaciones sobre el estado de Tyrese. Durante una entrevista en la línea de banda con Lisa Salters de ESPN, John Haliburton dio la noticia que todos temían: Tyrese había sufrido una grave lesión en el tendón de Aquiles.

“Está tan bien como se puede estar dadas las circunstancias”, compartió John, con la voz firme pero cargada de emoción. Explicó que Tyrese estaba rodeado de su familia en el vestuario, intentando apoyar a sus compañeros desde la distancia a pesar del devastador golpe.

El lado humano del mayor escenario de la NBA

La angustia visible de John Haliburton fue un recordatorio del impacto personal que estos momentos de alta presión tienen para las familias de los jugadores durante unas Finales de la NBA. Su confirmación de la lesión de Tyrese se difundió rápidamente en redes sociales y medios tradicionales, aportando claridad en medio de la creciente especulación.

La organización de los Pacers pronto emitió un comunicado oficial confirmando que Tyrese no volvería a disputar el Juego 7 debido a la lesión en el tendón de Aquiles.

Aunque el equipo continuó compitiendo sin su base All-NBA, la atención se centró en el tiempo de recuperación y la gravedad de la lesión. Los primeros reportes indican que Haliburton podría perderse una parte significativa de la próxima temporada, a la espera de más evaluaciones e imágenes médicas.

Por ahora, el enfoque dentro del equipo está en apoyar a Haliburton durante su rehabilitación y prepararse para los desafíos que vendrán sin su estrella en la cancha.