Para Smart, ex Jugador Defensivo del Año y líder curtido en batallas de playoffs, el traspaso representa tanto un nuevo capítulo en su destacada carrera como un reflejo del creciente magnetismo que rodea a Doncic en Los Ángeles.

Una saga de agencia libre que comenzó con una rescisión de contrato con los Washington Wizards dio un giro inesperado cuando Luka Doncic, la nueva piedra angular de los Lakers, se comunicó personalmente para reclutar a Smart. “[Luka] me llamó y yo dije, ‘sí, claro.’ Y al día siguiente, otra vez… Ahí supe que era en serio”, contó Smart en su conferencia de presentación.

“Cuando un tipo como Luka te llama… para ver si querés unirte a algo especial que está intentando construir… eso significa mucho.” Para Smart, quien durante años fue tanto rival como admirador del talento excepcional de Doncic, la oportunidad de construir algo en Los Ángeles junto a un jugador de ese calibre representaba un paso irresistible en su carrera.

El reclutamiento personal de Luka Doncic

Antes de esta postemporada, la relación entre Smart y Doncic se basaba en “respeto y entendimiento mutuo como competidores”, con elogios cruzados después de enfrentamientos intensos. Smart, quien admitió haber sido escéptico ante el primer acercamiento de Doncic, pronto descubrió la sinceridad y persistencia del candidato a MVP.

“Ya no es un ‘qué pasaría si’. Es real, y es algo que teníamos que hablar. Fue una gran sensación”, reflexionó Smart, atribuyendo su decisión a los esfuerzos constantes de Doncic.

La llegada de Smart cerró el ciclo de una larga búsqueda por parte de los Lakers, que querían incorporar a un pilar defensivo capaz de elevar la resistencia del equipo en el perímetro. También provocó movimientos inmediatos en la plantilla, con Los Ángeles despidiendo a Shake Milton y Jordan Goodwin para hacerle espacio a su nuevo guardia.

Lo que aporta Smart — y lo que viene para L.A.

Marcus Smart se une a los Lakers con un contrato de dos años y 11 millones de dólares, aportando una defensa élite en el punto de ataque, capacidad como creador secundario y una voz veterana respetada a una plantilla que apunta más alto bajo el liderazgo de Luka Doncic. Tras una temporada 2024-25 plagada de lesiones y dividida entre Memphis y Washington, Smart llega sano y motivado.

“Me siento muy motivado, después de las lesiones y una racha de derrotas en los últimos dos años”, comentó, presentándose como una pieza clave en un vestuario que busca volver a competir seriamente.

A medida que se adapta, la profundidad en la rotación de los Lakers mejora instantáneamente en ambos extremos de la cancha. Smart, tres veces elegido al Primer Equipo Defensivo de la NBA, no solo aporta experiencia de campeonato desde su etapa con los Celtics, sino que también libera a Doncic de algunas exigentes tareas defensivas, lo que podría maximizar el rendimiento general del equipo.

Como dijo el propio Smart, jugar con Doncic vestido de púrpura y dorado “significa mucho”, y los aficionados de los Lakers pueden esperar que esta dupla se convierta en un eje central de la próxima campaña de playoffs.