El campeón mexicano Saúl ‘Canelo’ Álvarez no tiene dudas: este sábado subirá al ring con la intención de noquear al puertorriqueño Edgar Berlanga. En su última comparecencia, el dueño de los cinturones supermedianos de la AMB, CMB y OMB dejó claro que su objetivo es finiquitar el combate antes del límite.

“Voy a subir mañana a noquear”, afirmó con determinación el Canelo, quien cuenta con un impresionante récord de 61 victorias, 39 de ellas por nocaut, 2 derrotas y 2 empates. Álvarez buscará sumar una nueva victoria contundente en la T-Mobile Arena de Las Vegas, donde se espera un lleno total con unos 20,000 fanáticos, la mayoría apoyándolo.

Por su parte, Berlanga también ha hecho sus promesas, asegurando que dejará al mexicano en la lona en el sexto asalto. Sin embargo, Canelo se mostró confiado en que el combate será un desafío diferente para el joven peleador.

"Sabemos que Berlanga saldrá a tirar con todo, pero va a ser muy difícil que me conecte. Desde los primeros rounds lo voy a castigar, quiero que sienta dolor", afirmó Álvarez, seguro de su preparación y estrategia. El mexicano no ha ganado por nocaut desde su victoria sobre Caleb Plant en noviembre de 2021, pero está decidido a cambiar eso este sábado.

Berlanga, por su parte, mantiene una actitud desafiante. Durante el pesaje, envió un mensaje claro a su rival: “Vamos arriba, Puerto Rico, mañana habrá guerra”. El puertorriqueño confía en que su inteligencia en el ring será clave para derrotar al veterano campeón.

"Para mí, esta pelea no se decide por la fuerza, sino por la inteligencia", explicó Berlanga. "Canelo ha enfrentado a muchos grandes, pero este combate será distinto. Yo vengo a quitarle su lugar en este deporte".

La expectación crece mientras ambos peleadores se preparan para lo que promete ser una batalla explosiva el 14 de septiembre, en una noche donde la rivalidad México vs. Puerto Rico volverá a encender las luces del boxeo mundial. 

Canelo, agradecido por el apoyo de su gente, no dejó pasar la oportunidad de responder a su retador. “Es fácil decir que me va a noquear, pero Berlanga no ha visto nada como lo que le espera mañana. Necesitará veinte versiones de él mismo para darme problemas", sentenció el mexicano, dejando claro que no subirá al cuadrilátero con intenciones de ser compasivo.