El conflicto que reaparece cada dos años

La AFCON 2025 está a la vuelta de la esquina y, como ocurre en cada edición, un debate incómodo volvió a estallar en Europa: ¿hasta qué punto “molesta” este torneo a los clubes del Viejo Continente? La chispa esta vez la encendió Cesc Fàbregas, hoy entrenador del Como, al afirmar que “no tiene sentido” que su mediocampista Assane Diao abandone el equipo para unirse a Senegal en plena temporada.

El comentario desató un terremoto. La mesa de 5 Aside lo planteó claro: detrás de los argumentos tácticos y del miedo a perder jugadores importantes, sigue existiendo un sesgo histórico. Cuando un futbolista es citado para la Eurocopa o la Copa América, casi nadie habla de “inconveniencia”. Cuando el destino es la AFCON, el discurso cambia.

La paradoja es evidente: muchos de los cracks que sostienen a las ligas europeas vienen del continente africano, pero cada ciclo deben justificar que representar a su país es tan legítimo, prestigioso y necesario como cualquier otro torneo internacional.

Cuando el club pide prioridad… pero África pide respeto

El panel del programa desmenuzó el conflicto con matices. Desde la óptica de un club, perder a un titular en pleno calendario europeo es un golpe real: riesgo de lesión, pérdida de ritmo competitivo, presión por ascender, evitar el descenso o meterse en puestos europeos. El caso de Como no es menor: se trata de un proyecto histórico intentando consolidarse en la élite.

En ese sentido, la preocupación de Fàbregas tiene una lógica deportiva. No es lo mismo ceder un jugador en junio que en medio de la temporada.

El problema —como subrayaron en la mesa— está en el tono. Cuando se sugiere que no “vale la pena” ir a una AFCON, especialmente con una selección como Senegal, el mensaje termina sonando despectivo hacia el torneo y hacia el fútbol africano en general.

Senegal, una potencia que exige reconocimiento

El caso de Assane Diao abrió la puerta a una discusión más profunda: ¿por qué sigue existiendo la percepción de que ir a la AFCON es “un problema” para los clubes?

En 5 Aside lo dejaron claro:

• Senegal es un candidato real al título.
• Diallo no estaría yendo a un torneo menor, sino a una competición de élite.
• Para cualquier jugador africano, levantar la AFCON es comparable a cualquier consagración continental.

La molestia europea, entonces, parece tener menos que ver con el calendario y más con una mentalidad que no ha evolucionado al mismo ritmo que el talento africano. Mientras los clubes miran la tabla de posiciones, para muchos jugadores esta puede ser la oportunidad de su vida.

Un torneo que significa historia, identidad y legado

Mientras algunos técnicos solo ven el riesgo de perder a una pieza importante, en África la AFCON es el corazón del fútbol. Es el escenario donde se forjan ídolos, donde nacen generaciones doradas y donde los futbolistas sienten que defienden algo más grande que ellos mismos: su bandera, su historia y su gente.

En el programa lo resumieron con una idea que golpea fuerte:
si realmente valoras a tu jugador, también deberías querer verlo perseguir esa clase de historia.

La AFCON no es un estorbo en el calendario ni una molestia logística: es una celebración continental de máximo nivel, con estadios llenos, presión extrema y partidos que marcan carreras.

Camino a Marruecos 2025: un debate viejo, una AFCON nueva

Con Senegal, Marruecos, Costa de Marfil, Nigeria y otras potencias preparando su asalto al título, la AFCON 2025 llega envuelta en debates de siempre, pero con una generación de talento que ya no acepta ser mirada por debajo del hombro.

Lo que está claro es que el torneo merece el mismo respeto que cualquier otra gran competición continental. Y a partir del 21 de diciembre, podrás vivir cada partido, cada discusión y cada batalla por la gloria africana en su totalidad por beIN SPORTS.