El tiempo de Neymar en Arabia Saudí ha llegado a su fin de manera abrupta, marcando un capítulo lleno de dificultades. El delantero brasileño, cuyo paso por Al-Hilal comenzó con grandes expectativas, estuvo plagado por una grave lesión que lo dejó fuera del campo durante un año. Su largo proceso de recuperación terminó por causar más problemas que soluciones para el club, lo que llevó a la rescisión de su contrato tras varios giros en su situación con la entidad saudí.

La lesión que lo cambió todo

Los problemas de Neymar comenzaron con una seria lesión en los ligamentos de la rodilla en 2022 que lo mantuvo fuera de los campos durante varios meses. Tras recuperarse, el jugador volvió a la acción el 21 de octubre de 2023, pero su regreso fue fugaz. Solo unos días después, Neymar sufrió una nueva lesión muscular, lo que dejó desilusionado al club Al-Hilal. El entrenador Jorge Jesús perdió la fe en la capacidad del brasileño para rendir al nivel esperado, y se hizo evidente que Neymar no formaría parte de los planes del equipo para el resto de la temporada.

Con solo seis meses restantes en su contrato y un salario que superaba las ocho cifras, la situación de Neymar se volvió insostenible. Durante una rueda de prensa, Jorge Jesús confirmó: "Neymar no puede rendir al nivel que esperamos. Todavía tiene contrato con Al-Hilal, y tal vez sea él quien decida su futuro". El club dejó claro que Neymar ya no estaba en sus planes, y fue entonces cuando el jugador tuvo que evaluar sus opciones.

La decisión de terminarlo

En un giro inesperado, Neymar pasó de afirmar que decidiría su futuro una vez se recuperara completamente de su lesión a decidir rescindir su contrato. A principios de la semana pasada, quedó claro que el jugador no tenía intención de seguir en Arabia Saudí, y su foco se trasladó a un regreso a Brasil. A pesar del interés de clubes de la MLS, como Chicago Fire, Neymar y su agente, Pini Zahavi, trabajaron diligentemente para facilitar su regreso a casa.

A lo largo del fin de semana, las discusiones entre el entorno de Neymar y la directiva de Al-Hilal se intensificaron. Si bien el acuerdo estaba casi cerrado, el obstáculo económico seguía presente. Neymar aún debía cobrar 90 millones de dólares por los seis meses restantes de su contrato. Ambas partes acordaron realizar una última reunión el 27 de enero para resolver el asunto.

Un finiquito lucrativo

Finalmente, Al-Hilal aceptó las condiciones de Neymar, comprendiendo que el jugador probablemente jugaría un papel importante como uno de los embajadores del Mundial de 2034 en Arabia Saudí. Para evitar dejar una mala impresión, el club decidió llegar a un acuerdo con Neymar y, según informa el diario AS, le pagará entre 30 y 40 millones de dólares como parte de la rescisión de su contrato.

Con esta millonaria indemnización, Neymar se prepara para su regreso a Santos, el club donde comenzó su carrera, con la esperanza de recuperar su mejor forma y volver a ser el jugador que alguna vez cautivó al mundo del fútbol. Con este contrato resuelto, el futuro de Neymar parece ahora enfocado en Brasil, donde comienza una nueva etapa de su carrera.