Este domingo, Real Madrid y Barcelona lucharán por conquistar la Supercopa de España, el primer título de 2025. El partido, que se llevará a cabo en el Estadio King Abdullah en Arabia Saudita, promete ser un espectáculo con ambos equipos presentando alineaciones plagadas de estrellas y llegando a la final con un estado de forma destacado. 

Un enfrentamiento de gran importancia

Más allá del trofeo, el resultado de este partido proporcionará un impulso mental crucial para el equipo que salga victorioso. La influencia de este resultado se sentirá en el desarrollo de la temporada, ya que ambos equipos siguen luchando por la supremacía en LaLiga, la Champions League y otras competiciones. La final también garantiza la presencia de jugadores clave, entre ellos Dani Olmo, quien fue re-inscrito por el Consejo Superior de Deportes (CSD) y podrá jugar con Barcelona, al igual que Pau Víctor.

Para Real Madrid, el partido llega en un momento de gran confianza. El equipo lidera LaLiga después del receso invernal y su ataque está en gran forma, con un promedio de más de tres goles por partido en los últimos ocho encuentros. Jude Bellingham, con nueve goles en diez partidos, y Kylian Mbappé, que ha alcanzado su mejor nivel tras un comienzo irregular, son figuras clave. Sin embargo, Vinícius Júnior vuelve a estar bajo el foco de atención, después de su expulsión en Valencia y los dos partidos de sanción que cumplirá en liga.

La batalla por la supremacía

Por su parte, Barcelona busca terminar con su sequía de títulos, que data de la LaLiga 2023. La Supercopa es una oportunidad para que Xabi Flick impulse a su equipo con un impulso psicológico, algo clave para Barcelona en ediciones pasadas. Hace dos años, Barcelona ganó el título y luego se coronó en LaLiga, y el año pasado, Real Madrid levantó la Champions League tras una destacada actuación de Vinícius en la final.

Barcelona también llega en gran forma, con la mayoría de sus piezas principales disponibles, entre ellas Olmo, quien podría ser la gran novedad en el once titular. Flick ha elogiado el rendimiento de Olmo, quien anotó el primer gol contra Athletic Bilbao, y podría iniciar por Gavi. También queda la duda sobre quién ocupará el arco: Wojciech Szczesny o Iñaki Peña, quien fue relegado a la banca en la semifinal por llegar tarde a un entrenamiento.

Enfoque táctico y jugadores clave

Para Flick, el objetivo será mantener un estilo de juego con presión alta y transiciones rápidas, apoyándose en el buen momento de Raphinha y la creatividad de Lamine Yamal. La defensa probablemente será liderada por Koundé, Cubarsí e Iñigo Martínez, con Ronald Araújo en el banquillo debido a rumores sobre su futuro, aunque Flick ha expresado su deseo de que permanezca en el club. En cuanto a Real Madrid, Carlo Ancelotti enfrenta una decisión táctica sobre si darle el mando del equipo a Eduardo Camavinga o a Luka Modric, aunque el equipo está bien preparado para luchar por otro título.

Una final que promete emociones

La Supercopa de España se ha consolidado como un evento anual en Arabia Saudita, y el Estadio King Abdullah estará casi lleno con su capacidad de 62,000 espectadores. La afición se dividirá, aunque, a juzgar por el ambiente en las semifinales, los seguidores de Real Madrid podrían ser mayoría en las gradas. También se aplicará una nueva regla: si el partido termina empatado tras 90 minutos, el título se decidirá por penales, ya que no habrá prórroga para evitar sobrecargar a los jugadores. 

Reflexiones finales

Si Real Madrid gana, igualará a Barcelona con catorce títulos en la Supercopa de España y sumará otro trofeo a su reciente colección, que incluye la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental. La final se perfila como un choque de titanes, con ambos equipos buscando marcar la diferencia en lo que queda de temporada.

Alineaciones probables: Real Madrid: Courtois; Lucas Vázquez, Tchouameni, Rüdiger, Mendy; Valverde, Camavinga, Bellingham; Rodrygo, Vinícius Júnior y Mbappé.

Barcelona: Szczesny; Koundé, Cubarsí, Iñigo Martínez, Balde; Casadó, Pedri; Lamine Yamal, Olmo, Raphinha; y Lewandowski.

Árbitro: Gil Manzano (Comité Extremeño)
Estadio: Estadio King Abdullah, Yeda.