En un mundo del fútbol donde todo se filtra y los fichajes se anuncian antes de que se firmen, el FC Porto logró lo impensado: presentar a Luuk de Jong como nuevo refuerzo sin que nadie lo viera venir. Ni siquiera el mismísimo Fabrizio Romano, la máxima figura del periodismo de transferencias, anticipó esta bomba que explotó en Do Dragao y rompió con la rutina del mercado.

Una presentación a la vieja escuela

Durante la presentación del equipo de cara a la temporada 2025-26, justo antes del amistoso frente al Atlético de Madrid, el Porto lanzó su carta bajo la manga: Luuk de Jong, con el dorsal 26 en la espalda, apareció en el césped sin previo aviso.
El veterano delantero neerlandés, de 34 años, firmó como agente libre tras finalizar contrato con el PSV Eindhoven, y lo hizo en total silencio mediático. Una jugada maestra del club portugués que tomó a todos por sorpresa.

Sin rumores, sin filtraciones: el fichaje fantasma

En pleno momento donde Fabrizio Romano e insiders están pendientes de cada movimiento y monitoreando a cada jugador, el caso de De Jong fue una anomalía gloriosa.
Ni rumores, ni pistas, ni publicaciones crípticas: solo una aparición estelar en el estadio que recordó a los viejos tiempos del fútbol, donde los anuncios eran eso: anuncios, no spoilers.

Números que avalan su vigencia

En su última temporada con el PSV, De Jong sumó 18 goles y 13 asistencias. Lejos de pensar en el retiro, llega al Porto con ganas renovadas y experiencia de sobra, buscando dejar huella en el fútbol portugués. Y lo hace como un verdadero “fichaje fantasma”, escapando de las redes del insider más conocido.