El Real Madrid dejó dudas en su estreno en el Mundial de Clubes, tras un empate 1-1 frente al Al-Hilal. Pero más allá del resultado, el foco está en el momento de Vinicius Jr., que parece cada vez más lejos del nivel que lo llevó a estar entre los mejores del mundo.

Una caída libre

Desde que se le escapó el Balón de Oro, el rendimiento de Vini se ha venido abajo. El brasileño no encuentra su lugar en el campo, sus decisiones son erráticas y se le ve desconectado del resto del equipo. Los defensas rivales, le han tomado la medida y salvo algunas pinceladas de genialidad, el brasileño brilla por su ausencia en partidos importantes. 

Más dudas que certezas

Los números de Vinicius no reflejan del todo la sensación que deja en el campo, pues a pesar de que marcó 21 goles y dio 18 asistencias en la pasada temporada con el cuadro merengue, la sensación es la de un jugador apagado, sin chispa, que cuando el equipo más lo necesita, no logra ser ese factor diferencial. Ante Al-Hilal esto fue más que evidente y terminó siendo sustituido en el tramo final del partido por Víctor Muñoz.

El reto que tiene Vini por delante

Si quiere volver a pelear por cosas grandes y liderar al Madrid, Vinicius tendrá que reencontrarse consigo mismo y recuperar esa versión explosiva que lo hizo brillar. El Mundial de Clubes apenas empieza y puede ser este el golpe de necesidad que necesite el brasileño para despertar del letargo y volver a creer en su viejo lema de “lo intentaré 10 veces si hace falta” pues es justo eso lo que el madridismo espera volver a ver en él.