El duelo argentino entre Vélez Sarsfield y Racing Club, por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores, terminó con victoria por 0-1 para la Academia, pero estuvo cargado de controversias en torno al arbitraje y a las decisiones del VAR. El gol de Adrián “Maravilla” Martínez terminó siendo la diferencia, aunque el encuentro en el estadio José Amalfitani dejó mucha tela para cortar debido a las jugadas revisadas y anuladas por la tecnología.

El VAR cambia el rumbo del partido

La primera gran polémica se dio en el minuto 43, cuando el central Lisandro Magallán fue expulsado tras recibir dos amarillas en menos de diez minutos. El árbitro brasileño Wilton Pereira Sampaio ratificó su decisión tras la revisión, dejando al Fortín con diez jugadores antes del descanso. Esa acción condicionó el resto del compromiso y encendió la protesta de la hinchada local.

La segunda intervención clave del VAR llegó en el minuto 63, cuando un tiro de esquina derivó en una gran definición de Aarón Quirós que significaba el empate para Vélez. La jugada fue celebrada con euforia en las gradas, pero tras varios minutos de revisión el tanto fue anulado porque la pelota había salido de los límites del campo antes del centro. La decisión desató la bronca del público y del cuerpo técnico de Guillermo Barros Schelotto, que no podían creer la suerte adversa de su equipo.

El gol válido y el cierre dramático

Antes de esas jugadas, el marcador ya había cambiado a favor de Racing. En el minuto 53, una gran combinación entre Santiago Solari y Facundo Mura terminó con la asistencia al goleador Maravilla Martínez, que definió con frialdad para establecer el único tanto del partido. El gol, sin polémica en este caso, fue suficiente para que los dirigidos por Gustavo Costas viajaran a Avellaneda con ventaja en la serie.

Sin embargo, la tensión no terminó allí. En el tiempo de descuento, el ingresado Matías Pellegrini estuvo a punto de empatar para Vélez, pero apareció la figura de Facundo Cambeses, arquero suplente de Racing, quien con una intervención brillante evitó el gol y selló el triunfo de su equipo.

Una serie abierta con aroma a polémica

El 0-1 deja a Racing con ventaja para el partido de vuelta en el estadio Presidente Perón, pero también con la presión de definir la clasificación en casa. Para Vélez, la sensación es amarga: más allá de las oportunidades claras y del esfuerzo con un hombre menos, el VAR fue protagonista en dos acciones que marcaron el rumbo del partido.

La revancha en Avellaneda promete ser igual de intensa, con la polémica todavía fresca y un lugar en semifinales de la Libertadores en juego.