El presidente de Paraguay, Santiago Peña, expresó su confianza en que la final de la Copa Sudamericana entre el Racing argentino y el Cruzeiro brasileño que alberga este sábado la capital de su país se viva como "una fiesta".

"La verdad que va a ser una fiesta, y nosotros estamos dando todo de nosotros para que la recepción sea la adecuada, la seguridad sea la adecuada y va a ser realmente una fiesta", declaró Peña a los periodistas durante su visita al departamento de Concepción, en el norte del país.

El gobernante destacó la importancia de que la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) haya elegido a Asunción como la sede del partido, después de que esta capital acogió en 2019 la final entre Independiente del Valle y Colón.

Peña destacó que se han instalado cuatro pantallas gigantes en diferentes puntos de la ciudad para quienes no puedan entrar al estadio General Pablo Rojas, 'La Nueva Olla', ubicado en el barrio asunceno de Barrio Obrero, con capacidad para 45.000 personas.

El mandatario invitó a la gente a "que salga, que disfrute de esta hermosa fiesta del deporte".

La capital paraguaya se apresta para recibir unos 60.000 visitantes, por lo que las autoridades locales han desplegado un operativo de seguridad por tierra y por aire que incluye a unos 7.000 policías y a un grupo de militares de apoyo.

Según la Dirección Nacional de Migraciones, hasta determinada hota habían ingresado al país 40.224 turistas, de los cuales 32.995 eran argentinos, 6.624 brasileños y 605 de otras nacionalidades.