Atlético de Madrid fue el protagonista del primer gran papelón del Mundial de Clubes 2025. A pesar de vencer 1-0 a Botafogo en el cierre del Grupo B, el conjunto colchonero quedó eliminado en fase de grupos al no lograr la diferencia de goles necesaria para avanzar a octavos de final.

El planteamiento de Simeone no fue suficiente

Diego “Cholo” Simeone apostó desde el inicio por un ataque encabezado por Rodrigo De Paul, su hijo Giuliano Simeone y Julián Álvarez. Sin embargo, la ofensiva careció de profundidad y contundencia. En la segunda mitad ingresaron Nahuel Molina y Ángel Correa en busca de un revulsivo, mientras que Juan Musso permaneció en el banco de suplentes.

Griezmann marcó, pero no alcanzó

El único gol del partido llegó gracias a Antoine Griezmann, quien rompió una sequía goleadora que se remontaba a febrero. Sin embargo, el tanto fue insuficiente: el Atlético necesitaba ganar por tres goles o más para superar la diferencia de gol frente a sus rivales del grupo.

El equipo rojiblanco manejó el ritmo del encuentro, especialmente en el tramo final del primer tiempo, pero no logró reflejar su dominio en el marcador. Botafogo, por su parte, se defendió con orden y resistió los intentos ofensivos españoles.

Un arbitraje polémico

El árbitro mexicano César Ramos fue otro de los protagonistas de la noche. Su actuación generó controversia tras omitir al menos un par de posibles penales sobre Julián Álvarez, lo que provocó airadas protestas desde el banco colchonero.

Atlético se despide entre dudas

Con la eliminación consumada, París Saint-Germain y Botafogo se clasificaron a octavos de final como primero y segundo del Grupo B, respectivamente. En el otro partido del grupo, el PSG venció 0-2 a Seattle Sounders, asegurando su liderato.

La eliminación temprana del Atlético de Madrid deja múltiples interrogantes sobre el futuro del proyecto de Simeone. ¿Deberían los directivos plantearse un cambio de rumbo o darle una nueva oportunidad al técnico más longevo del fútbol europeo?