El exfutbolista portugués Luis Figo, quien dejó una huella imborrable tanto en el Barcelona como en el Real Madrid, volvió a abrir el debate sobre hipotéticos fichajes entre los dos gigantes de España. Durante una charla organizada por Betfair, el luso afirmó que, si pudiera repetir una operación similar a la que lo llevó de la Ciudad Condal a la capital hace 25 años, se decantaría por Pedri como el jugador que incorporaría al conjunto merengue.

El recuerdo de su propia “traición”

El fichaje de Luis Figo en el año 2000, cuando el Real Madrid pagó la cláusula de rescisión para hacerse con sus servicios, sigue siendo uno de los episodios más recordados del fútbol europeo. Aquella operación fue considerada una auténtica traición por la afición culé y marcó un antes y un después en la rivalidad entre ambos clubes.

Ahora, el propio Figo reconoce que un movimiento similar con Pedri tendría un impacto comparable. “Quizá del Barça, Pedri. Si fuera al revés, del Real Madrid, elegiría a Valverde. Son grandísimos jugadores, con un rendimiento altísimo siempre. Son un seguro y son muy importantes en sus equipos”, señaló.

El portugués también recordó cómo su fichaje fue visto como un traspaso carísimo en su momento, con los 60 millones de euros pagados por el club blanco, una cifra que hoy, según él mismo admitió, “sería casi normal en un mercado donde se pagan cantidades desorbitadas por operaciones regulares”.

Pedri, el gran anhelo

El caso de Pedri añade aún más dramatismo a este escenario hipotético. El canario reveló en varias entrevistas que en su momento fue rechazado en pruebas con el Real Madrid, una decisión que terminó llevando al mediocampista a triunfar con la camiseta del Barcelona. “Cuando hice la prueba en Valdebebas fue extraño, me dijeron que no estaba a la altura y me fui a casa”, confesó recientemente.

Para Figo, esa ironía del destino podría revertirse si en algún momento Pedri llegara al Santiago Bernabéu. “Su fichaje sería tan mediático como lo fue el mío”, aseguró el exfutbolista, dejando claro que un movimiento así podría reavivar la eterna batalla entre culés y merengues.