El esperado encuentro entre el Villarreal CF y el FC Barcelona, correspondiente a la jornada 17 de LaLiga, no se jugará finalmente en Miami como estaba previsto. La patronal del fútbol español anunció este martes la cancelación del proyecto, alegando “la incertidumbre generada en España durante las últimas semanas” como principal motivo de la decisión.

Un proyecto que buscaba internacionalizar el fútbol español

A través de un comunicado oficial, LaLiga explicó que la promotora del “Partido Oficial de LaLiga en Miami” comunicó su decisión de suspender la organización del evento. El encuentro, que debía disputarse en diciembre, formaba parte de un plan ambicioso para expandir la presencia del fútbol español en el mercado estadounidense.

“LaLiga lamenta profundamente que este proyecto, que representaba una oportunidad histórica e inigualable para la internacionalización del fútbol español, no pueda seguir adelante”, señaló la institución.

Desde la organización también se destacó que la celebración de un partido oficial fuera de España habría sido “un paso decisivo en la expansión global de la competición”, con el objetivo de fortalecer la visibilidad internacional de los clubes y consolidar la marca del fútbol español en un mercado estratégico como Estados Unidos.

Sin embargo, el proyecto ha vuelto a enfrentarse a una serie de obstáculos legales e institucionales que impidieron su ejecución, a pesar de que, según LaLiga, “cumplía plenamente con la reglamentación federativa y no afectaba la integridad de la competición”.

Segunda cancelación en seis años

No es la primera vez que LaLiga ve frustrado su intento de llevar un partido oficial fuera del territorio español. En 2018, el acuerdo con la empresa Relevent para disputar el Girona-Barcelona en Miami también fue bloqueado por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), que alegó la falta de autorización oficial.

El conflicto terminó en los tribunales y se resolvió en contra de LaLiga, primero en un juzgado mercantil de Madrid y posteriormente en la Audiencia Provincial y el Tribunal Supremo, que confirmaron la imposibilidad de jugar partidos de una competición nacional fuera de su propio territorio.

La FIFA, por su parte, ha mantenido una postura firme en este sentido, reforzada en su reglamento de 2024, en el que establece que los encuentros oficiales deben disputarse dentro del país de la federación correspondiente para preservar la integridad deportiva, la seguridad y el equilibrio competitivo.

Pese a este nuevo revés, LaLiga aseguró que seguirá trabajando “para llevar el fútbol español a todos los rincones del mundo” y mantener una visión “abierta, moderna y competitiva” que beneficie a clubes, jugadores y aficionados.

Aunque el sueño de ver un Villarreal-Barcelona en Miami se desvanece, la intención de globalizar el fútbol español sigue viva en los planes de la organización.