Lionel Messi es la gran ausencia del All-Star Game entre la MLS y la Liga MX, y como era de esperarse, su ausencia desató una ola de rumores. Uno de los más llamativos y virales apunta a una supuesta razón personal: evitar enfrentarse a Sergio Ramos, capitán del combinado mexicano y viejo conocido de batallas en el Clásico español. Pero, ¿realmente hay algo de cierto en eso?

¿Qué se sabe de la ausencia de Messi?

El argentino no participó en ninguna de las dos sesiones de entrenamiento del All-Star en Austin, y su presencia en el partido sigue siendo una incógnita. Nico Estévez, entrenador del equipo de estrellas de la MLS, se limitó a decir que esa decisión correspondía al club y a la liga: “Espero que esté. Tener al mejor de la historia aquí es importante para todos”.

Jordi Alba, compañero de Messi en el Inter Miami, tampoco se presentó a los entrenamientos ni al concurso de habilidades. Esto ha alimentado las especulaciones, aunque hasta ahora no se ha informado de ninguna lesión oficial.

¿Messi evitó a Sergio Ramos por miedo?

La teoría de que Messi no quiere enfrentar a Sergio Ramos es completamente infundada. Si bien fueron rivales históricos en los Clásicos entre Barcelona y Real Madrid, su relación cambió cuando compartieron vestuario en el Paris Saint-Germain. De hecho, tanto Messi como Ramos han declarado públicamente que se llevan muy bien y que formaron una gran amistad en París.

En una entrevista de 2023, Ramos incluso reveló que su relación con Leo fue “mucho mejor de lo que esperaba”, y que era un placer tenerlo como compañero. Messi, por su parte, también habló positivamente del español, y ambos mostraron camaradería en redes sociales y actos del club.

¿Entonces por qué no juega el argentino?

Más allá del morbo, todo apunta a que Messi simplemente está siendo reservado físicamente por Inter Miami, que atraviesa una etapa exigente del calendario. Además, su ausencia no confirmada podría deberse a molestias menores o decisiones técnicas internas.

Eso sí: si no hay lesión oficial y Messi no se presenta al partido, podría ser sancionado con un partido de suspensión, como lo marca el reglamento de la MLS, tal como ocurrió con Zlatan Ibrahimovic en 2018.

Sea cual sea la causa, lo cierto es que Lionel Messi no le huyó a Sergio Ramos. La narrativa de una rivalidad “pendiente” no tiene sentido hoy, especialmente cuando existe un vínculo de respeto mutuo y una amistad sólida entre ambos.