El fútbol regala imágenes eternas e icónicas que se graban en la memoria de los aficionados. Para los seguidores del Real Madrid, el adiós de Toni Kroos será inolvidable. En lo más alto, al mando del fútbol de un equipo legendario, su retirada del césped de Wembley estuvo llena de sentimiento, recordando la despedida de Juanito en 1985.

Son épocas distintas con similitudes, como las remontadas europeas que forman parte de la identidad del Real Madrid. En los años 80, fue la Copa de la UEFA. Hoy, la “Champions”.

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En octavos de final, el Real Madrid había sido goleado 5-1 por el Borussia Mönchengladbach, pero, liderados por Juanito y José Antonio Camacho, remontaron con un 4-0 en el Santiago Bernabéu, con dobletes de Jorge Valdano y Carlos Santillana. Juanito, al ser sustituido, se retiró dando saltos de alegría, encendiendo al Bernabéu con su pasión.

El día que Toni Kroos se quitó la coraza fue en su despedida del Santiago Bernabéu en su último partido de LaLiga. Imperturbable durante el homenaje, rompió a llorar al abrazar a sus hijos al borde del campo. En Wembley, con el marcador 2-0, Kroos mostró su emoción al ser sustituido, abrazado por sus compañeros y dedicando gestos de agradecimiento a la afición y sus seres queridos.

Señalando el escudo del Real Madrid en su camiseta y lanzando besos, Kroos se despidió. Su sustituto fue Luka Modric, con quien compartió 23 títulos. El abrazo entre ambos y el de Carlo Ancelotti sellaron una era gloriosa.

De Juanito a Kroos, dos salidas del campo icónicas para los madridistas.