La reciente eliminatoria de Champions League entre Atlético de Madrid y Real Madrid sigue dando de qué hablar, más allá del resultado en la cancha. A más de una semana del derbi disputado en el Metropolitano, el club rojiblanco ha elevado una queja formal a la UEFA, entregando cuatro vídeos en los que acusa a jugadores del conjunto blanco de conductas inapropiadas tras el encuentro.

Luego de que Real Madrid sellara su pase a cuartos de final en la tanda de penales, algunos futbolistas celebraron cerca del fondo norte del estadio, donde se encontraban los aficionados colchoneros. Según el Atlético, las acciones de varios jugadores fueron provocadoras y contrarias al espíritu deportivo, motivo por el cual han pedido al máximo organismo europeo que actúe disciplinariamente.

Cuatro gestos, cuatro denuncias

Según reveló el periodista Rubén Uría, los jugadores señalados son Antonio Rüdiger, Vinícius Júnior, Dani Ceballos y Kylian Mbappé. El gesto más grave, según el club, fue el de Rüdiger, quien se dirigió a la grada rojiblanca haciendo el ademán de cortarse el cuello, en señal de burla o amenaza.

Por su parte, Vinícius fue captado provocando en repetidas ocasiones a los hinchas colchoneros, tanto mientras disputaba el partido como después de su sustitución. En otro de los vídeos, se ve a Ceballos haciendo un corte de mangas al entrar al túnel de vestuarios. El cuarto y último clip muestra a Mbappé tocándose sus partes íntimas frente al público local.

Estos hechos ocurrieron tras la celebración del triunfo merengue, pero en un contexto tenso, ya que, según el informe de la UEFA, se lanzaron entre 30 y 40 botellas al campo, además de un mechero, que fue recogido por Thibaut Courtois y entregado al árbitro Szymon Marciniak.

Reclamo por igualdad en sanciones

Mientras el Atlético de Madrid enfrenta un expediente abierto por el comportamiento de su afición, ahora reclama que también se investigue a los jugadores del Real Madrid. Como referencia, citan el caso de Diego Simeone, quien fue sancionado en 2019 por un gesto dirigido a su propia afición durante un partido ante la Juventus.

En el Metropolitano exigen el mismo criterio: si se castiga a un técnico por celebrar de forma inapropiada, también deben sancionarse provocaciones evidentes de los jugadores rivales. Por ahora, la UEFA estudia el caso y se espera que en los próximos días emita una resolución.

El ambiente entre ambos clubes continúa caldeado, y las decisiones de Nyon podrían marcar un precedente importante en la aplicación del fair play europeo.