El Paris Saint-Germain no solo jugará su segunda final de Champions League el próximo 31 de mayo en Múnich, también hará historia fuera del campo. Su presidente, Nasser Al-Khelaïfi, anunció que el club cubrirá todos los gastos de viaje y entradas para que sus aproximadamente 600 empleados asistan al duelo decisivo ante el Inter de Milán.

Un regalo que viaja a Múnich

La noticia fue comunicada directamente por Al-Khelaïfi en una carta interna enviada al personal del club, en la que agradeció el compromiso y esfuerzo de todos los departamentos. Desde administrativos hasta personal logístico, todos serán parte de la experiencia más importante de la temporada.

“El éxito de este club no sería posible sin el trabajo diario y silencioso de cada uno de ustedes”, expresó el presidente en su mensaje, según reportó el medio británico SPORTbible.

Bono adicional para todos

Además del viaje, el PSG también entregará un bono de rendimiento a sus empleados, una recompensa que usualmente solo está destinada a los jugadores del primer equipo. El objetivo de esta medida es reconocer el impacto colectivo del trabajo en todas las áreas del club, no solo en el terreno de juego.

El PSG, a un paso de la gloria

El equipo dirigido por Luis Enrique buscará levantar su primera UEFA Champions League cuando enfrente al Inter de Milán en el Allianz Arena. La iniciativa del presidente busca convertir este logro deportivo en una celebración institucional que involucre a toda la familia parisina.

El gesto de Al-Khelaïfi ha sido ampliamente elogiado por su valor simbólico y humano. En un fútbol cada vez más enfocado en cifras y estrellas, este tipo de acciones refuerzan la identidad del club y fortalecen el sentido de pertenencia de su plantilla.

El PSG quiere ganar en Múnich, pero también ha empezado a ganar puertas adentro. Con iniciativas como esta, Al-Khelaïfi deja claro que el éxito no solo se mide en títulos, sino también en cómo se construye un club desde adentro.