Boone bajo la lupa en El Bronx

El presente de los New York Yankees está lejos de lo que se esperaba a mediados de temporada. Lo que comenzó con una ventaja de siete juegos en la División Este de la Liga Americana se ha convertido en una caída sostenida, con una marca de 25-32 desde finales de mayo. La reciente barrida a manos de los Miami Marlins encendió las alarmas y reavivó el pedido de algunos aficionados para despedir al mánager Aaron Boone.

La serie en Miami fue un reflejo de los problemas actuales del equipo: un bullpen inestable, errores defensivos y una ofensiva que, sin Aaron Judge, ha carecido de consistencia. En el primer juego, desperdiciaron ventajas de hasta seis carreras y terminaron perdiendo 13-12. Las derrotas siguientes consolidaron una barrida inédita frente a un equipo al que nunca habían perdido una serie completa.

A pesar de las críticas, la directiva encabezada por Hal Steinbrenner parece mantener la confianza en Boone, quien renovó su contrato hasta 2027. Sin embargo, la presión no deja de crecer, especialmente en un mercado tan exigente como Nueva York.

Dudas en el pitcheo y esperanza con el regreso de Judge

El pitcheo abridor es una de las principales preocupaciones. Más allá de Max Fried y Carlos Rodón, la rotación no ha sido consistente. Luis Gil, recién activado tras una lesión, mostró altibajos en su debut de temporada, mientras que las nuevas incorporaciones como Camilo Doval y David Bednar no han tenido el impacto esperado.

En lo ofensivo, los Yankees siguen liderando la liga en jonrones y porcentaje de slugging, pero la ausencia de Aaron Judge ha pesado. El capitán, líder en múltiples estadísticas ofensivas, podría regresar esta semana en la serie contra Texas Rangers, lo que daría un impulso necesario a la alineación.

El tramo final, decisivo para Boone y los Yankees

Con 50 juegos restantes en la temporada regular, los Yankees aún ocupan un puesto de comodín, pero están a 4.5 juegos de los Toronto Blue Jays, líderes divisionales. El margen de error es mínimo y las próximas semanas serán clave para definir si Boone continúa al mando o si la directiva decide un cambio.

Algunos aficionados exigen su salida inmediata, otros reconocen que el problema va más allá del mánager y señalan también al gerente general Brian Cashman por decisiones cuestionables en el armado del plantel. Lo que es seguro es que, si el equipo no reacciona pronto, la crisis podría costarle caro a más de uno en El Bronx.