Oleksandr Usyk quiere enfrentar a Jake Paul pero no en una pelea de boxeo
El campeón indiscutido de peso pesado, Oleksandr Usyk, está definiendo su próximo rival y ha reducido la lista a tres posibles contendientes, entre ellos el polémico influencer convertido en boxeador, Jake Paul. Sin embargo, hay un detalle importante: el ucraniano no piensa enfrentarlo sobre el cuadrilátero.
La inesperada opción de un combate en MMA
Tras un impresionante historial que incluye victorias sobre figuras como Tyson Fury, Anthony Joshua y Daniel Dubois, Usyk se acerca al final de su carrera y analiza detenidamente sus próximos pasos. Según reportes, los tres nombres que su equipo considera para su próxima pelea son Tyson Fury, Joseph Parker y Jake Paul.
Sin embargo, el encuentro con Paul no sería una pelea tradicional de boxeo. Un miembro del equipo de Usyk, Sergey Lapin, explicó en una entrevista que están explorando opciones que sean interesantes tanto para el deporte como para el público. "La mayoría de los peleadores ha retado a Jake Paul, pero nuestra historia es distinta", afirmó.
La intención es realizar un combate en un octágono de MMA, modalidad que representa un reto distinto para ambos: Paul tiene algo de experiencia en artes marciales mixtas, mientras que Usyk debería adaptarse rápidamente. "Podría ser un gran espectáculo con una audiencia global enorme", agregó Lapin, señalando que las negociaciones ya están en marcha y que la pelea podría concretarse a principios del próximo año.
¿Y qué pasa con Fury y Parker?
Mientras tanto, Tyson Fury ha anunciado su regreso al boxeo tras su reciente retiro y existe la posibilidad de una tercera pelea contra Usyk luego de que el ucraniano ganara los dos primeros encuentros. Por otro lado, Joseph Parker es el siguiente en la fila para disputar los títulos mundiales de peso pesado, por lo que si Usyk decide no enfrentarlo, podría verse obligado a renunciar al cinturón de la WBO.
En conclusión, Oleksandr Usyk no solo busca nuevos desafíos deportivos, sino que también pretende ofrecer un espectáculo diferente, explorando la opción de un combate híbrido que mezcle boxeo y MMA frente a figuras mediáticas como Jake Paul. Esta apuesta podría ampliar su legado más allá del ring y captar la atención de un público mucho más amplio.