Erling Haaland marcó su centésimo partido con el Manchester City, un hito significativo que celebró con una victoria por 0-2 sobre el Chelsea. En una jornada que reflejó la solidez del equipo dirigido por Pep Guardiola, el City inició con fuerza la defensa de su título, aunque el juego no estuvo exento de dificultades. La victoria fue fundamental para el City, especialmente en un momento en el que la temporada comienza a arrancar y el equipo aún busca su mejor forma.

La maldición que hizo perder un trofeo a Cristiano Ronaldo

A pesar de un inicio sólido con un gol de Haaland a los 17 minutos, el Manchester City mostró signos de irregularidad durante el primer tiempo. La falta de claridad en el ataque y la vulnerabilidad en defensa dejaron al equipo expuesto a las incursiones del Chelsea, aunque la diferencia entre el delantero noruego y los atacantes del equipo local, como Nkunku y Nico Jackson, fue evidente.

El Chelsea, que aún está en proceso de reestructuración bajo la dirección de Enzo Maresca, no logró exigir mucho a Ederson hasta el final del primer tiempo. Cole Palmer fue uno de los jugadores que mostró algo de potencial ofensivo para el equipo londinense, pero su gol fue anulado por fuera de juego, dejando al Chelsea sin respuesta en la primera mitad.

En la segunda mitad, el City controló el juego y dominó al Chelsea, que solo pudo hacer frente a una breve ola de ataque impulsada por Pedro Neto. A pesar de los intentos de Maresca por añadir frescura al ataque con el debut de Marc Guiu y otras sustituciones, el Chelsea no logró revertir el marcador.

La victoria del Manchester City se concretó con un segundo gol de Mateo Kovacic, asegurando el triunfo por 0-2. Haaland, con 91 goles en sus primeros 100 partidos con el City, demostró su importancia al abrir el marcador, y la defensa del título continúa de manera efectiva. La sólida actuación del City, aunque no exenta de dificultades, subraya su potencial y dominio en la Premier League.