Una acción descomunal de David Raya en forma de doble parada en un penalti ejecutado por Mateo Retegui salvó al Arsenal (0-0) en Bérgamo. Fue una única intervención brillante en un duelo tosco ante el Atalanta, en el que no hubo un dominador claro y que terminó con un insípido empate sin goles gracias al meta español.

Raya fue el héroe claro de la noche en Bérgamo. Su doble acción salvadora condicionó el partido. Con una intervención de fuera de serie, detuvo el penalti y el rechace, amargando la noche de Retegui y hundiendo las esperanzas de la afición del Atalanta. Esto dio fuerzas al Arsenal, que, a pesar de todo, también fue incapaz de hacer daño a los italianos en un partido paupérrimo por parte de ambos equipos.

El Atalanta regresó a la Champions League 3 años después por la puerta grande, como campeón de la Europa League y en casa. Lo hizo ante un Arsenal que compite con el Manchester City en Inglaterra pero que sigue en busca de esa confirmación continental que aún le falta. El cóctel terminó en una zona gris, lejos de lo que prometía el duelo. Mucho respeto, pocas ocasiones y menos acierto -de todos menos de Raya- en un partido entre dos de los equipos con el fútbol más moderno de Europa.

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El duelo Gasperini contra Arteta, un enfrentamiento generacional en el banquillo con dos modelos de fútbol atractivo, propositivo y vistoso, se quedó en una especie de zona gris en la que ninguno pudo expresarse como suele hacerlo. Se anularon en ataque y defensa, sin que ninguno lograra ser superior durante un período prolongado.

Los 'Gunners' comenzaron mejor, dando la impresión de estar más asentados en el campo. La doble parada de Carnesecchi en el minuto 13 confirmó las sensaciones positivas de los del norte de Londres. Un disparo de falta de Saka, ajustadísimo al palo, obligó al meta italiano a sacar una mano salvadora. En el rechace, al que llegó Thomas Partey primero, tuvo que volver a intervenir bajo palos para salvar los muebles.

Lejos de amedrentar al combinado italiano, esa doble ocasión clara espoleó a la "Dea". Fue una reacción progresiva, pero constante, hasta que acabó siendo ligeramente superior en los primeros 45 minutos. Con una ocasión clara en los pies de Charles De Ketelaere, que tras una gran combinación con Retegui mandó fuera su disparo desde el perfil diestro del área.

Se mantuvo al inicio del segundo acto esa ligera superioridad de la "Dea", que aprovechó un despiste de Partey y una gran acción de Ederson para obtener un penalti tras un contacto prácticamente inexistente.

El VAR revisó la acción, pero no corrigió la decisión del colegiado. Retegui asumió la responsabilidad sin saber que sería su condena en la noche, porque Raya se hizo gigante. Se vistió de héroe, adivinando las intenciones y parando el disparo abajo a su derecha. Se levantó ágil para salvar sobre la línea el testarazo del propio Retegui en el rechace. Trabajo y mentalidad, una reacción élite.

Dos disparos de Cuadrado desde la distancia, en su debut con la camiseta "nerazzurra", fueron la única solución que encontró la "Dea" ante el bloqueo del Arsenal. Una contra malgastada por Martinelli a falta de 15 minutos fue la única amenaza inglesa. Un duelo extremadamente igualado y una derrota del Arsenal que salvó Raya.