En una de las decisiones más impactantes del mercado NBA, los Milwaukee Bucks han decidido cortar a Damian Lillard, pese a que aún le restaban dos años de contrato. El movimiento, reportado por ESPN y confirmado por Shams Charania, responde a una necesidad estratégica: liberar espacio salarial para incorporar al pívot Myles Turner, de los Indiana Pacers.

¿Qué implica esta decisión en lo económico?

Según la información filtrada, los Bucks pagarán a Lillard los 113 millones de dólares que le restan de contrato en los próximos cinco años. Esta estructura les permite absorber ese impacto económico de forma más manejable, al tiempo que desbloquean margen salarial para sumar a Turner con un acuerdo de cuatro años y 107 millones, con opción de jugador en la última temporada.

La salida de Lillard ocurre después de una campaña en la que promedió 24,9 puntos, 7,1 asistencias y 4,7 rebotes, aunque terminó lesionado del tendón de Aquiles izquierdo durante los últimos playoffs, una dolencia que lo dejará fuera de acción buena parte de la siguiente temporada. Esta situación habría sido clave en la decisión de Milwaukee.

¿Quién es Myles Turner y por qué lo buscan?

Turner, de 29 años, viene de una temporada destacada como líder defensivo en los Pacers finalistas de la NBA. Promedió 15,6 puntos, 6,5 rebotes y 2 tapones, y su llegada aportará protección de aro, rebote y versatilidad, complementando mejor a Giannis Antetokounmpo y Khris Middleton en un núcleo más defensivo y físico.

¿Qué sigue para Lillard?

Sin equipo por ahora, Lillard pasará por una etapa de rehabilitación mientras espera su próxima oportunidad en la NBA. A sus 34 años, su futuro es incierto, pero su talento y experiencia podrían llevarlo a firmar más adelante con un contendiente que apueste por su recuperación.