Max Verstappen no pudo ocultar su frustración tras una jornada de clasificación para el olvido en el Gran Premio de Bahréin. El piloto neerlandés, habitual protagonista de las primeras posiciones en la Fórmula 1, partirá desde el séptimo lugar en la parrilla, muy lejos del mejor tiempo marcado por Oscar Piastri. Un problema con los frenos de su monoplaza condicionó por completo su desempeño, dejando a Red Bull con más preguntas que respuestas a pocas horas de la carrera.

Desde el inicio del fin de semana, el equipo McLaren ha marcado el ritmo, y aunque se esperaba que Verstappen pudiera plantar cara, un fallo técnico lo alejó de los primeros lugares. "Era como chocar contra un muro cada vez que pisaba el freno", declaró el tricampeón mundial visiblemente molesto, aludiendo a las dificultades con el sistema de frenado de su coche.

La gran preocupación de Red Bull y Verstappen

El asesor del equipo, Helmut Marko, confirmó tras la sesión que se trató de un “problema masivo” en el coche de Verstappen, aunque todavía desconocen su origen. “Los datos lo reflejan claramente, pero aún no sabemos por qué ocurrió. Hicimos cambios pensando que serían mejoras, pero fue al contrario”, explicó. El fallo solo afectó al auto del neerlandés, mientras que su compañero Yuki Tsunoda logró meterse entre los diez primeros sin mayores inconvenientes.

Marko aseguró que, sin esa falla, Verstappen habría estado en condiciones de pelear por un lugar en el podio: “Posiblemente habría sido tercero o cuarto”, aseguró. Aun así, valoró que ambos coches clasificaran dentro del Top 10, lo que considera un mérito dadas las circunstancias.

Por su parte, Verstappen fue claro: “Todo el fin de semana ha sido complicado. El coche no gira, no frena, no responde. Hemos probado todo tipo de ajustes y nada ha funcionado”. Además, señaló que el problema no es nuevo: “Lo vengo sintiendo desde el inicio del año, pero en este circuito se notó mucho más”.

Con el campeonato al rojo vivo y apenas un punto por detrás de Lando Norris —actual líder—, el mal resultado en clasificación podría significar un golpe duro para sus aspiraciones. Aun así, el neerlandés mantiene la esperanza y guarda una estrategia bajo la manga: reservó un juego adicional de neumáticos duros para la carrera. “No sé cómo funcionarán, pero es una opción. Veremos qué podemos hacer desde ahí”, concluyó.

La carrera de este domingo promete emociones, y todos los ojos estarán puestos en si Red Bull logra revertir la situación y permitir que su estrella recupere terreno.