En medio de un complicado momento institucional, San Lorenzo de Almagro se prepara para rendir homenaje a su hincha más emblemático: el papa Francisco. El club argentino, que atraviesa días convulsos tras la denuncia por corrupción contra su presidente, vivirá este sábado una jornada cargada de emoción en el Nuevo Gasómetro, donde se enfrentará a Rosario Central por el torneo Apertura.

Un emotivo adiós en el Nuevo Gasómetro

El 'Ciclón' saldrá al campo no solo con la presión deportiva de mejorar su posición en la zona B, sino también con el peso simbólico de despedir a uno de sus seguidores más ilustres. Jorge Bergoglio, ferviente fanático azulgrana desde su juventud, falleció el pasado lunes, y el club ha preparado un sentido homenaje para honrar su memoria.

El plantel, liderado por el español Iker Muniaín, llegará al estadio en un autobús especialmente decorado con una imagen del papa alzando el escudo de San Lorenzo y la frase "Siempre Cuervo". Además, como parte de la ceremonia previa al partido, los aficionados recibirán banderines en los colores blanco y amarillo, representativos del Vaticano, que teñirán las gradas durante la salida del equipo al campo.

El humo tradicionalmente azulgrana será reemplazado en esta ocasión por una estela blanca y amarilla, mientras una gigantesca bandera con el rostro de Francisco cubrirá gran parte de la tribuna popular. Los jugadores también portarán en su camiseta un parche con el mensaje "Juntos por la Eternidad", junto a la imagen del pontífice.

La semana de homenajes comenzó el miércoles, cuando San Lorenzo celebró una misa en la capilla San Antonio, en el barrio de Almagro, donde en 1908 el sacerdote salesiano Lorenzo Massa fundó la institución para alejar a los jóvenes de las calles.

Una crisis dirigencial que no da tregua

Este emotivo tributo se da en un contexto de profunda crisis para el club. El martes, el presidente Marcelo Moretti fue denunciado penalmente por presunta administración fraudulenta, después de que un video lo mostrara recibiendo 25.000 dólares en un escándalo relacionado con el fichaje de juveniles. Tras el escándalo, Moretti solicitó licencia en sus funciones el jueves, y un día después su oficina en el estadio fue allanada por la policía.

Entre la conmoción por la pérdida de su hincha más famoso y el terremoto institucional, San Lorenzo intentará este sábado encontrar un momento de paz en su casa, mientras su hinchada y sus jugadores unen sus corazones para despedir a quien, desde el Vaticano, nunca dejó de ser un verdadero 'Cuervo'.