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¿Regresa El "Virrey"? Boca Juniors tendría en su lista de posibles técnicos a Carlos Bianchi
Tras la salida de Fernando Gago como director técnico de Boca Juniors, el nombre que más revuelo ha causado entre hinchas y medios es el de Carlos Bianchi. Según múltiples reportes, Juan Román Riquelme y el Consejo de Fútbol manejan una lista de candidatos para ocupar el banco xeneize, y entre ellos figura el entrenador más ganador en la historia del club, quien podría protagonizar un inesperado "último baile" con el equipo de sus grandes hazañas.
Aunque no ha habido contactos formales hasta el momento, versiones cercanas a la dirigencia indican que Riquelme estaría dispuesto a convencer a Bianchi para que vuelva a asumir un rol activo en el club. A sus 76 años y tras más de una década alejado de los bancos, el "Virrey" podría regresar en una función estratégica, posiblemente como cabeza de un cuerpo técnico más que como entrenador a tiempo completo.
Opiniones divididas entre los hinchas y otras opciones en carpeta
Este posible regreso genera una mezcla de ilusión y escepticismo entre los fanáticos. Para muchos, sería una forma de revivir los años dorados de Boca, en los que Bianchi cosechó títulos locales e internacionales que marcaron una época. Para otros, su última etapa entre 2013 y 2014 dejó más dudas que certezas, y consideran que su ciclo como DT ya está cerrado.
Mientras tanto, el club mantiene en carpeta a otros entrenadores con mayor actividad reciente, como Gabriel Milito y Gustavo Quinteros. Milito aparece como el favorito por su estilo de juego y disponibilidad, aunque todavía no ha recibido una propuesta concreta. Quinteros, por su parte, estaría dispuesto a escuchar al club, aunque se lo considera una alternativa si las principales opciones no prosperan.
Más allá de los rumores, la posible vuelta de Carlos Bianchi representa mucho más que una decisión táctica. Sería un gesto simbólico y emocional con el que Riquelme buscaría marcar su presidencia, apostando por una figura legendaria en un momento delicado para el club tras la salida de Gago. Un sueño difícil, pero no imposible.