Ángel Di María vivió una noche cargada de emociones en su despedida del Benfica. El argentino no pudo contener las lágrimas tras la derrota 3-1 frente al Sporting Lisboa en la final de la Copa de Portugal, en lo que fue su último partido con las Águilas. Acompañando ese momento tan especial, su esposa, Jorgelina Cardoso, publicó un sentido mensaje en redes sociales que rápidamente se volvió viral entre los fanáticos.

Lágrimas en Lisboa

El Estadio Nacional fue testigo del final de un ciclo. Pese al resultado adverso, la imagen de Di María emocionado en el banco de suplentes conmovió a propios y extraños. El rosarino había anunciado días antes que su etapa en el Benfica estaba llegando a su fin, y la final de copa terminó siendo su despedida oficial.

Desde la tribuna, Cardoso no solo presenció el partido, sino que también le dedicó unas palabras que reflejan admiración y orgullo por su pareja y por el profesional que sigue siendo.

“Si de algo me convenzo cada día más es de tus ganas de ganar siempre, cada partido y cada final como si nunca hubieses ganado nada. Eso te hace enorme”, escribió en sus historias de Instagram junto a una foto tomada desde la platea.

El mensaje, cargado de emoción, continuó con una frase que encendió la ilusión de los hinchas de Rosario Central:

“Esa zurda todavía no va a descansar… y yo a tu lado, dándote mi hombro una vez más para que frenes, pienses, respires profundo y sigas adelante. Te amo con todas mis fuerzas”, cerró, acompañando el texto con dos corazones azul y amarillo, colores identificados con el Canalla.

Respuesta y futuro en el aire

Di María no tardó en responder con palabras que reflejan su esencia como futbolista:

“Gracias, amor. Soy así y no puedo cambiarlo. Siempre dejé la vida por cada camiseta que tuve puesta. Y seguiré haciéndolo porque soy así”, escribió el Fideo, de 37 años, dejando la puerta abierta a seguir compitiendo.

Aunque su futuro es incierto, todo indica que el campeón del mundo con la Selección Argentina no continuará en Europa. Ha rechazado propuestas millonarias del exterior y ya tendría avanzada la mudanza de su familia a Rosario, mientras analiza si seguirá jugando o colgará los botines.

¿Rosario Central o retiro?

La gran incógnita ahora pasa por saber si Di María aceptará el desafío de jugar en Rosario Central, el club que lo vio nacer, o si pondrá fin a su carrera profesional. Las versiones son cruzadas y todavía no hay una definición clara.

Por otro lado, su participación en el próximo Mundial de Clubes también está en duda. Mientras algunos rumores indican que podría formar parte del plantel de Benfica para el torneo en Estados Unidos, el periodista italiano Fabrizio Romano aseguró en los últimos días que el argentino no integrará la delegación de las Águilas.

Lo único cierto es que, juegue donde juegue o incluso si decide no hacerlo más, Di María se marcha del Benfica como un referente y con el cariño intacto de una hinchada que supo aplaudir su talento. Ahora, la pelota la tiene él.