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El Real Madrid jugará en una ciudad donde comen carne de caballo
El Real Madrid tuvo que intentar dar la vuelta a su dolorosa derrota frente al Atlético Madrid en el Derbi para emprender un viaje que nadie quería hacer dentro de la Champions League. La visita al Kairat Almaty supone un viaje de casi 7,000 kilómetros que llega en medio de una serie de partidos muy exigentes para el equipo.
Xabi Alonso buscará dar la vuelta, o intentar sanar heridas en un destino exótico que tiene costumbres únicas como ingerir carne de caballo o leche de camello.
Carne de caballo y leche de camello: los sabores únicos de Kazajistán
La carne de caballo es uno de los grandes símbolos de la gastronomía de la estepa kazaja, un territorio inhóspito tanto en verano como en invierno, donde las temperaturas extremas marcan la vida diaria.
Su sabor, cuando es guisada, no difiere demasiado de otras carnes, aunque los kazajos la prefieren ahumada o en embutido, similar a una longaniza. En Almaty, además, la tradición convive con la modernidad, y es posible encontrar la popular hamburguesa de carne de caballo, una opción que despierta la curiosidad de turistas y locales.
La experiencia culinaria se complementa con la leche de caballo y la leche de camello, dos bebidas tradicionales muy consumidas en la región. Estas se combinan con las clásicas bolitas de queso seco que los nómadas llevaban en sus largos viajes por la estepa, ya que aportaban la energía y los nutrientes necesarios para resistir las travesías más duras.
El bazar: especias, hierbas y frutas típicas
Los bazares de Kazajistán son un espectáculo de colores y aromas, donde se encuentran especias y hierbas para cocinar o fortalecer la salud. También destacan los frutos secos, los albaricoques secos y las granadas frescas, que se exprimen a presión en utensilios tradicionales para ofrecer un jugo natural y revitalizante.

Kazajistán, la tierra donde nació la manzana
Aunque pueda parecer sorprendente, Kazajistán es considerado la cuna de la manzana. Este fruto silvestre se convirtió en alimento esencial en todo el mundo, pero las manzanas kazajas conservan características únicas: un sabor intenso y un tamaño considerable. Incluso en las montañas a más de dos mil metros de altura, los manzanos siguen produciendo variedades resistentes al frío extremo, lo que convierte a esta fruta en un verdadero emblema nacional.