Una visita inesperada en el clásico argentino

La noche del empate 1-1 entre Boca Juniors y Racing en La Bombonera tuvo un condimento especial: la presencia de los All Blacks en las tribunas. El legendario equipo de rugby de Nueva Zelanda, en Argentina para disputar el Rugby Championship frente a Los Pumas, decidió vivir en carne propia la mística del fútbol argentino y se sumó a los cantos de La 12.

Entre banderas, bombos y una marea azul y oro, los jugadores se mostraron impresionados por la intensidad de la hinchada. El “fullback” Rieko Ioane resumió la experiencia con un breve pero contundente mensaje en sus redes: “Locura de atmósfera”. Por su parte, el pilar Ethan de Groot compartió un video disfrutando del ambiente mientras retumbaban los cánticos xeneizes.

Otros integrantes del plantel como Du’Plessis Kirifi, Fletcher Newell, Damian McKenzie, Ollie Norris, Brodie McAlister y Sevu Reece también compartieron imágenes y videos, dejando en claro que la noche en el Estadio Alberto J. Armando será un recuerdo imborrable.

El rugby se prepara, pero el fútbol los conquistó

Los All Blacks llegaron al país para enfrentar a Los Pumas el sábado 16 de agosto en el estadio Mario Alberto Kempes, en Córdoba, y repetirán el duelo una semana después, el 23 de agosto, en el José Amalfitani de Buenos Aires. Sin embargo, antes de pensar en el debut en el torneo, decidieron darse un gusto y empaparse de la cultura futbolera argentina.

Acostumbrados a estadios imponentes en el mundo del rugby, los neozelandeses no ocultaron su asombro por la intensidad y la pasión de la hinchada xeneize, que no dejó de alentar un solo minuto. Para varios de ellos, fue la primera vez en un partido de fútbol en Argentina, y la experiencia dejó en claro que la conexión entre deportes y culturas puede ser tan fuerte como el propio juego.

Con esta visita, los All Blacks sumaron un capítulo distinto a su estadía en Argentina: uno en el que la ovalada se mezcló con el balón de fútbol, y en el que los cánticos de Boca Juniors resonaron igual de fuerte que un haka previo a un gran partido.