El gol con el que el Barcelona se consagró campeón
El FC Barcelona conquistó su 28º título de LaLiga tras imponerse con autoridad por 0-2 ante un Espanyol combativo, pero superado en momentos clave, en un duelo marcado por la tensión previa al arranque debido a un atropello masivo en las inmediaciones del estadio.
El ambiente en el RCDE Stadium era denso, tanto por lo sucedido fuera del campo como por lo que estaba en juego. Para los locales, la salvación; para los visitantes, la gloria. Y aunque los primeros minutos fueron dominados por la intensidad del Espanyol, que buscó sorprender con ataques rápidos, fue el conjunto de Hansi Flick el que terminó imponiendo su sello.
El misil de Lamine Yamal que cambió el partido y la Liga
En un encuentro cerrado, con pocas ocasiones claras, la chispa la encendió el de siempre: Lamine Yamal. El joven talento del Barcelona volvió a dejar su huella con un gol espectacular en el minuto 53. Recibió al borde del área y, sin apenas espacio, sacó un disparo seco y colocado que se coló por la escuadra izquierda del portero Joan García. Fue un golpe anímico demoledor para el Espanyol, que hasta entonces se había mostrado firme.
Tras el tanto, el equipo dirigido por Manolo González intentó reaccionar con varios cambios ofensivos, pero la expulsión de Cabrera en el minuto 80, por una dura entrada sobre el propio Yamal, terminó de desequilibrar el partido.
Ya en el tiempo añadido, y con un Barcelona más cómodo y dueño del balón, apareció Fermín López para cerrar el encuentro con un gol en el 90+5, aprovechando los espacios dejados por una defensa local desbordada. El 0-2 definitivo selló un título merecido para los blaugranas, que venían de eliminar al Real Madrid con autoridad en la jornada anterior.
La celebración, sin embargo, no se extendió en el césped. Por indicaciones de Flick, los jugadores se dirigieron al vestuario para festejar en privado, mostrando respeto por los hechos sucedidos fuera del estadio y la situación deportiva de su rival.

Con este resultado, el Barcelona se asegura el campeonato y deja al Espanyol con la obligación de sumar puntos en las últimas jornadas para evitar el descenso. Mientras tanto, el equipo culé ya piensa en cerrar la temporada con doblete, aún con la final de Copa por disputar.