Los tiros fallidos de larga distancia al final de los cuartos — conocidos comúnmente como “heaves” — ahora solo contarán contra el porcentaje de campo del equipo, y no afectarán las estadísticas individuales del jugador. Este ajuste busca incentivar a los jugadores a intentar lanzamientos lejanos sobre la bocina sin temor a perjudicar su promedio personal de tiro.

Criterios para que un tiro se clasifique como un “heave”

Para que un lanzamiento califique como un heave bajo la nueva regla, deben cumplirse todos los siguientes requisitos:

• El intento debe ocurrir dentro de los últimos tres segundos de cualquiera de los tres primeros cuartos.
• El tiro debe realizarse desde al menos 11 metros de distancia (más allá del círculo central extendido).
• La jugada debe comenzar en el backcourt (zona defensiva del equipo que ataca).

Si se cumplen estas condiciones, un heave fallado se registrará como un tiro de campo fallado del equipo, y no como un fallo individual.

Motivo del cambio

Esta regla fue introducida porque muchos jugadores solían dudar en lanzar tiros lejanos y de baja probabilidad al final de los cuartos para proteger su porcentaje de acierto. La NBA espera que, al eliminar la penalización estadística individual, los jugadores se animen más a intentar tiros sobre la bocina, lo que podría generar más momentos espectaculares para los aficionados.

La NBA está utilizando la Summer League como campo de prueba para esta regla, siguiendo experimentos similares realizados previamente en la G League. La liga aún no se ha comprometido a implementar esta norma en la temporada regular, pero su desempeño durante la Summer League probablemente influirá en decisiones futuras.

Aparte de la nueva regla sobre los heaves, la NBA Summer League 2025 mantiene su estructura habitual, con los 30 equipos participando en Las Vegas del 10 al 20 de julio. Cada equipo disputará al menos cinco partidos, y los cuatro mejores tras los primeros cuatro encuentros avanzarán a los playoffs.